martes, 27 de agosto de 2013

PUERTA ESTRECHA: SI PIERDES GANAS

Dios es siempre fiel a su alianza. Aunque el pueblo se equivoque, aunque el pueblo le de la espalda, Dios siempre permanece fiel al cumplimiento de su promesa: “que el estaría siempre acompañando a ese pueblo” dice la Palabra de Dios “Duros de servís”. Cabeza dura, un poco como.... como nosotros. 
¿En qué consiste esa promesa de restauración?. Lo hemos escuchado en el día de hoy, que la promesa del Señor vislumbra a través de los oráculos proféticos una nueva situación en Jerusalén. Dice que: "Todas las naciones de la tierra, todos los hijos de Dios irán a Jerusalén; serán congregadas todas las naciones de la tierra en Jerusalén y allí se manifestará la Gloria de Dios". 
¿En qué consiste la Gloria de Dios? 
En su presencia en medio del pueblo. 
Por eso estamos hablando de una promesa de restauración, porque el lugar en donde se manifestaba la Gloria de Dios en aquel momento, se encontraba destruido. Se reedificará la ciudad santa. Los cielos nuevos y la tierra nueva constituyen el tema fundamental de éste texto del profeta Isaías, tomado del Capitulo 36. Todo será restablecido, congregaremos a todos los hijos de Israel que están dispersados por todas partes, vendrán de todos los lugares del mundo, de oriente, de occidente, del norte y del sur. Todos vendrán a Jerusalén. Allí se manifestará la gloria de Dios que será un motivo de consuelo y de alegría para todos. Para los que están escuchando este texto, que están pasando por la desgracia mas grande, este texto es un alivio, una luz de esperanza. Ellos dirían “esperamos que realmente esa promesa se cumpla, si realmente Dios es el Dios la alianza, Él mismo llevará a cabo el cumplimiento de esa promesa".
Dentro de los hijos que retornen a la ciudad santa, reedificada, reconstruida, ahí yo escogeré sacerdotes. ¿Por que les dice eso? Porque en el momento de hacerse la profecía, no contaban con sacerdotes que mediaran entre el pueblo y Dios. Ellos eran los que ofrecían los sacrificios para la remisión de los pecados. Así que, llegados los sacerdotes, el pueblo sería purificado y perdonado.
¿Dios cómo cumple esta promesa?
En la plenitud de los tiempos envía a su Único Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, que viene a establecer una nueva y eterna alianza con el pueblo de Dios. Alianza sellada a través de su pasión, muerte y resurrección, de su entrega en la cruz. El Señor, ofreciéndose a sí mismo, intenta devolvernos la dignidad que habíamos perdido y nos vuelve a constituir como hijos suyos y para ello, el Señor, en el contexto de la nueva alianza, va a crear, va reedificar un nuevo pueblo, sellado con el signo del bautismo, por el cual somos incorporados a los efectos de la nueva alianza. Hoy el Libro de Isaias hablaba de una señal, de un signo, y no solo para los Israelitas, sino que en la nueva alianza se van a convocar todas las naciones de la Tierra y todas ellas van a ser congregadas al rededor del único sacrificio del Hijo Único de Dios. 
Éste es el componente que se da a través del mandato misional que hemos escuchado en el salmo responsorial: Id al mundo entero y proclamad el evangelio. La lectura nos decía que Dios escogería a Israelitas y los mandaría a todos los rincones de la tierra, a aquellas gentes que nunca habían escuchado hablar de Dios, para que también en esos pueblos se pudiera manifestar la gloria de Dios. Es la misión que los Apóstoles encarnan en la plenitud de los tiempos, cuando reciben el mandato misional. “id y haced discípulos bautizándolos en el Nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo” a todas las naciones de la tierra, hasta los rincones mas apartados del mundo (hasta finisterra), porque, por allí se asomó Santiago.
Así se va constituyendo ese espacio sagrado desde el cual podemos dar una respuesta satisfactoria al Padre Celestial, por el ofrecimiento ininterrumpido del único y verdadero sacrificio, que es el de Nuestro Señor Jesucristo.
¿Cual es ese espacio adecuado, al que nos incorporamos por el bautismo?
La Iglesia. Es el lugar en el que hemos sido reconstituidos, reedificados, es el nuevo pueblo de Dios. Nosotros como Iglesia gozamos de la permanente presencia de la Gloria de Dios.
¿El Señor nuestro Dios se hace presente aquí entre nosotros, como Iglesia, aquí y ahora? ¿donde resplandece la Gloria de Dios?
En cada sagrario, en la Eucaristía, en la vida sacramental de la Iglesia que tiene por cima y fuente la Eucaristía. Donde está la presencia de Jesús sacramentado, allí esta la gloria de Dios. ¿cuantos sagrarios hay repartidos por el mundo entero?
Y aun sigue siendo una tarea de todos nosotros manifestar a quien no conozca a nuestro Dios, indicar donde se encuentra el lugar en donde se manifiesta la Gloria de Dios. Es done todos tenemos que colaborar tomando parte en la misión de la Iglesia
¿si lo estamos haciendo? ¿cuando una persona nos deja ver su necesidad de Dios, lo conducimos al lugar en donde la Gloria de Dios reposa?
Intentarlo ya es algo muy importante. Hay que pedirle al Señor esa Gracia, pero, primero, hay que pedirla para uno mismo.
Ese espacio adecuado en el cual el señor ha querido manifestar su gloria viene a perpetuar el anuncio del mensaje de un evangelio que es el que Nuestro Señor Jesucristo quiso otorgarnos para que nosotros alcanzáramos la salvación y la vida. Vino a comunicarnos unas enseñanzas ordenadas a un principio fundamental: el amor, la caridad “Amaos los unos a los otros como yo os he amado” algo que Nuestro Señor Jesucristo no solo expresó de palabra, sino que lo cumplió también encarnandola en su propia vida. La naturaleza de un amor que es capaz de renunciar a si mismo y entregar su propia vida por Dios y por los demás. Ahí está nuestra tarea, basada en este mandamiento de doble objeto: “Amar a Dios con toda tu alma, con todo tu corazón, con todo tu ser y al prójimo como a ti mismo. Has eso y tendrás la vida eterna"
Pero ¿que pasa? Que a la hora de llevar a cabo este mandato nos encontramos con la resistencia de nosotros mismos. Porque el Señor nos invita y nos dice: "Amad a vuestros enemigos, perdonad a quienes os persigan y calumnian" Suele ser difícil, porque requiere caminar una senda en la que nuestro orgullo va bajando, un camino en el cual nuestro propio criterio y voluntad se ven puestos a prueba. Un camino en el que no quiere que exista otra seguridad que no sea Él. Si afianzamos nuestra seguridad en otra cosa, normalmente se nos cae.
Alguien podría decir: _“es una camino exigente”_, además porque es un Dios celoso que si uno le abre el corazón, va a empezar a pedir. Empezará a ser exigente conmigo, te llevará por un camino, en el cual, si de verdad le abres tu corazón, te darás cuenta que empezarás a morir a muchas cosas de ti mismo; para que resplandezca aquello que Dios conoce que está dentro de ti. Te liberará, entonces, de toda esclavitud, de todas las mascaras, de toda la hipocresía y auto-engaño que en un determinado momento te lleva a poner la seguridad en otra cosa que solo sea Dios.
La carta a Los Hebreos nos dice: eso duele. Dice que cuando Dios nos corrige: duele. La carta usa la palabra castigo, pero hay que matizar que no significa que Dios esté ahí, obsesionado por poner el dedo en la llaga cada vez que nosotros fallamos, pero, siendo verdad que Dios nos ama y que el verdadero amor corrige, el verdadero amor tiene en cuenta que la otra persona necesita salir de la ignorancia o del error, pues, Dios se preocupa por eso y como buen Padre corrige a sus hijos, haciéndolos pasar por ese proceso de purificación.
Esa es la puerta estrecha. Si te llenas de un montón de cosas, no puedes entrar por ella. Si estas satisfaciendo tu propio ego, tu propia vanidad, tus propias pasiones, estarías completamente ancho como para no caber por esa puerta tan estrecha. Por eso el Señor quiere desasirte, liberarte de toda carga que te haga mas difícil aun el camino que el mismo escogió y que él mismo preparó para la Iglesia, sin ocultar las exigencias que conllevan pasar por allí “el que quiera seguirme, que se niegue a si mismo, tome su cruz y venga en pos de mi y el que hace eso es digno de mi” Esa es la exigencia que se planeta en el día de hoy. 

¿Por que es dolorosa? 
_Porque nuestra carne chilla_

A lo mejor alguno se ha dado cuenta que el Señor le está exigiendo que haga un acto de humildad en una situación concreta y se propone, por ejemplo, hacer un acto de humildad con el marido o con la esposa  (que están cerrados como un bunker) y dice: 
_Tranquilo, amor; has las cosas como tu digas” 
¿por dentro que pasa? 
_“¡nooooooooooo! ¿cómo se te ocurre decirle eso? ¡Antes muerto que sencillo!_
A lo mejor tienes que ofrecerle el perdón a alguien que te ha hecho daño: 
_Oye mira, si, a lo mejor, me he equivocado contigo, si no has sabido leer las cosas y has reaccionado de una manera inadecuada conmigo, yo te pido  perdón y te perdono por todo lo que me dijiste_
...hay algo aquí por dentro que se resiste:
_"Es el que tiene que pedirte perdón" (diría nuestra carne, nuestro orgullo) "hasta que no venga y se rebaje, no hagas nada"¡Claro!, que trabaje el orgullo".... 
esa es la carne que chilla interiormente y que nos impide dar ese paso. Por eso la carta a los Hebreos dice: “Duele
Pero también, esta carta nos anima y nos dice que el efecto de la humildad en el corazón, es la honradez, la transparencia y la paz que tanto anhela tu corazón. Porque ¿si te sostienes en tu orgullo, podrías realmente alcanzar la paz del corazón?. El orgullo te lleva al resentimiento, al rencor, a la mentira, a la critica, a la murmuración; y a más. eso normalmente siembra en nuestros corazones una vida con mayores dificultades, llena de tensiones. Muchas veces sostenernos en el orgullo es asegurar a largo plazo la infelicidad; entonces significa que  vamos a sufrir igual y no vamos a resolver ningún problema.
_¿Me entienden lo que les estoy diciendo?_
La humildad nos hace sufrir en un primer momento, pero luego libera nuestro corazón. Como, cuando, un medico está tocando una herida y la está sanando, puede ser que duela, porque el medico tiene que quitar todo lo que esta podrido, tiene que sacar lo malo y al hacerlo, duele, pero cuando haya limpiado, esa herida empieza a sanar y llega el alivio.
No nos resulta fácil entender la corrección.
Díganme ¿cuantos padres de familia hay aquí, que con todo el amor de su corazón y con el mejor deseo de ayudar a sus hijos, les piden ciertas cosas y los chicos los rechazan y muchas veces se niegan a escucharlos?. 
Otras veces se enojan porque se los pides o exiges:
_“que mal padre y madre eres tu”_
Aveces no es fácil se padre a ese nivel.
Se ha dicho que para poder ejercer la funcion de Padre y madre hay que saber conjugar dos elementos difíciles de conjugar. La firmeza, que es necesaria junto con la caridad y el amor y lo que significa no dejarse provocar, no responder ante las provocaciones que brotan de la resistencia y el orgullo de los hijos... porque si reaccionas con rabia, pierdes autoridad
¿Te has dado cuenta de eso?
Hay que saber hacer las cosas como las hace Dios padre. 
¿Dios es firme con nosotros?: 
_Firme!_ Señala el camino que hay que seguir y nunca vacila. 
Y pasa que la mayoría de las veces el camino que Él quiere que tu sigas es el que tu no quieres caminar; así, puede ser una norma de discernimiento (según método Ignaciano) Él te quiere llevar por donde muchas veces tu no quieres ir. San Ignacio decía que para distinguir el camino de Dios, se puede observar cual produce mas resistencia interior y seguramente ése es el camino que Dios a elegido para ti.

Hay que pedirle al Señor la gracia de entender la necesidad de sabernos corregir y reconducir por el Señor. Ahí sobrevendrá sobre nosotros una enorme libertad de corazón y podremos reconducir nuestros pasos por esa puerta angosta. Hay un evangelio similar que nos habla de dos caminos: uno ancho, sin mayores dificultades, sin problemas, cuesta abajo, que lleva a la perdición y existe el camino angosto, difícil, arduo, que lleva a la salvación y dice el Señor: “Muchos se van por el camino  ancho y pocos eligen el que lleva a la salvación” es la respuesta que el Señor da al hombre que le pregunta; _“¿señor: serán pocos los que se salven?_ El señor nunca dice un número, pero si establece el criterio del camino ancho y el camino angosto. 
Pues, es que estamos acostumbrados al facilisimo, porque, díganme cuantos de nosotros, que estamos acostumbrados a lo fácil, ante dos circunstancias, en que una exige esfuerzo bajo la primicia: poco esfuerzo máxima eficacia ante y la otra que a lo mejor requiere un esfuerzo mayor a la eficacia lograda y ¿cual elegiríamos nosotros?
Yo me pongo a pensar en una realidad de sufrimiento, por ejemplo, una persona que tiene que abordar un problema matrimonial, una situación en la que ya no aguanta mas la injusticia que vive dentro de su hogar: dos caminos, uno fácil y uno difícil: 
El fácil: _Yo porque tengo que aguantarme a esa persona, que se mate solo, que viva dentro de su propia emisaria  yo tengo que empezar a vivir mi propia vida, a salvar lo poco que me queda por salvar. Es más, voy a abrir un perfil en “Badoo” y así me van a salir un montón de pretendientes”.
Ese camino es muy fácil porque estas huyendo del problema; o se te ha olvidado que en algún momento has decidido comprometer tu vida con esa persona y acompañarla en las alegrías y en las penas, en los momentos alegres y en lo no tan alegres. 
¿Hasta que momento tu estas dispuesto a avanzar por un camino que exige de ti un trabajo de reconciliación, de examen?, haber hasta donde están siendo tocados por el orgullo y basando la relación en perjuicios que los llevan a atacarse mutuamente. ¿no será que el Señor te está invitando a la humildad y quiere que tu esposa y esposo, del cual quieres alejarte, reciba por medio de tu paciencia la gracia que necesita para alcanzar el camino de la salvación?.
La vida nos plantea una exigencia basada en que el cumplimiento de los propósitos exige esfuerzo, entrega y dedicación, siempre estás sometido a prueba... muchos son los llamados, pocos los elegidos. El camino estrecho es una camino que va purificando la intención del corazón y nos ayuda a guiarnos por lo esencial, madurando así al alma que se prepara para acceder a los bienes eternos y nos va a semejando al aquel que inauguró ese camino que es Nuestro Señor Jesucristo. Con Cristo se abre le puerta y junto con Él, la vida verdadera consiste en entrar por aquella puerta estrecha. 
El que se cierra de corazón, el que se busca a sí mismo egoistamente, el que no permite la realización del proyecto de Dios en su vida, lo que hace es cerrarse a la posibilidad de entrar y el Señor lo dice hoy de un modo muy tajante, pues, usa una parábola en la que habla del fin de nuestra vida: cuando aparezca, el Señor dirán: _pero si aquí estoy, Señor, pero si yo he ido a la Luz; si yo, allí, he escuchado tu Palabra y me he aguantado las homilías del Padre Francisco... qué sacrificio tan grande, Señor; aquí estoy_
_No te conozco_”
La cuestión no es simplemente responder ante los formalismos de nuestra fe, sino ajustar nuestra vida al mensaje que el Señor nos ha anunciado, ponerlo en práctica, de esta manera se van formando en nosotros los mismos sentimientos de Cristo Jesús y el Padre conocerá en cada uno de nosotros a su Hijo. Verá sus rasgos: su perdón, su comprensión, su caridad: _Entra a tu casa_ Te dirá.  y si no están esos rasgos dirá: _Apartaos de mi. No os conozco”_
Parece muy fuerte lo que nos dice el Señor en la Palabra ¿Será para asustarnos? ¿será para que tengamos miedo?

_No hable de esas cosas, Padre. Me da yuyu_

Hay que concienciarnos de los que realmente estamos haciendo en este momento. Estamos sembrando una semilla de eternidad en nuestra vida y en nuestro corazón. No podemos desaprovechar el tiempo que es un don de Dios, no podemos seguir  engañándonos: _hoy no; mañana si me convierto_ No. Hay una exigencia que nos lleva a apersonarnos de este mensaje ahora, hoy y si eso exige que camines tu vida, que vuelvas al camino de la verdad, del bien, de la honestidad; es el momento para hacerlo hoy.
Entonces, dice la Palabra de Dios al final: “fortaleced vuestras manos” cuando uno tiene las manos débiles no se puede aferrar a nada...aunque hay que ir mas desasidos. “fortaleced las rodillas vacilantes” cuando las rodillas están mal, no podemos caminar. Hay que emprender el camino y como es tortuoso, pues, se necesitan fuerzas. Es una camino recto, pero exige esfuerzo y hay que estar en condiciones de caminarlo.
El Señor quiere llevar a cabo el cumplimiento de su promesa y nosotros somos la Iglesia que peregrina y que está dispuesta a cruzar por la puerta estrecha.
¿estamos dispuestos?
Vamos a pedirle al Señor esa gracia de corazón, vamos a pedírselo en esta celebración Eucarística y repito esta palabra: Fortaleced vuestro corazón, fortaleceros con los sacramentos, con la Palabra, escuchad a la Iglesia que os habla, escuchad sus enseñanzas, escuchad al Papa y poded en Práctica las enseñanzas que hemos recibido de Dios tanto en su Palabra como en la Iglesia. Vayamos por el camino recto.

domingo, 18 de agosto de 2013

FUERTES Y VALIENTES DE CORAZÓN

¡Muy buenos días a todos!
Vamos un día mas en este Domingo que nos a regalado Dios en la iglesia, a meditar en torno a un tema que tiene que ver, especialmente, con los que en un determinado momento hemos decidido seguir a Cristo; porque, intuyo, que, los que estamos aquí, es porque hemos decidido seguir a Cristo ¿intuyo bien? ...y nosotros después veremos si hemos tomado la decisión de seguir a Cristo (Es lo que nos manifiesta hoy la Palabra de Dios) que seguir a Cristo trae consigo... ¿una vida llena de flores? ¿un camino allanado sin ninguna dificultad y sin ningún problema? pues la Palabra de Dios nos manifiesta que seguir a Cristo significa,  al menos en medio de nuestro mundo, ser signos de contradicción.
Vamos a darnos cuenta que a través de las circunstancias tenemos que ser consecuentes con esa realidad y al ser consecuentes con esa realidad tenemos que alejarnos de algo que pueda atraparnos en un determinado momento, que es una consecuencia de la cobardía y es que nos dejemos atrapar por respetos humanos, que como consecuencia de eso, es no saber conocer lo que significa el alcance de nuestra respuesta de fe. Esa será la conclusión a la que lleguemos luego del trabajo que haremos alrededor de la Palabra de Dios de esta liturgia dominical. 

Hemos escuchado en la primera lectura un texto del profeta Jeremías , quien dentro del contexto en el que está escrito este texto, se encuentra en unos de los momentos mas álgidos, más difíciles del pueblo de Israel en el reinado del rey Sedesias, a quien le correspondió el tiempo del destierro y la destrucción de la ciudad santa; al rey que le sobrevino prácticamente la ruina del pueblo de Israel, al menos el pueblo de Judá. (Todavía no ha acontecido)... nos encontramos en los momentos previos a la invasión del pueblo Babilónico a  Jerusalen y su posterior destrucción y en ese momento el profeta Jeremías, haciendo eco de la voz de Dios en su corazón, le había dicho al rey Sedesías y a todos los príncipes del pueblo que como consecuencia de los pecados de idolatría, que como consecuencia de la injusticia que habían cometido sus hijos frente a a sus hermanos, que le iba a venir la ruina a través de un pueblo que en ese momento estaba conquistando las tierras de palestina; era el pueblo de Babilonia, de Caldea. Entonces Sedesias le dijo a su rey que era necesario que se detuviera, que no acudiera en ayuda de nadie ni se defendiera, que si quería preservar de alguna manera que la ciudad se salvara y no fuera destruida, tendrían que rendirse a los caldeos, que tenían que escarmentar como consecuencia de su olvido de Dios lo que él mismo les había promulgado como sentencia. Pero las palabras que Jeremías ofrecía tanto al rey como a su pueblo eran palabras que denunciaban la actitud que en su momento habían tenido.

Evidentemente es incomodo que alguien venga y nos denuncie nuestras idolatrías y nos diga las cosas que no estamos haciendo bien... ¿o no somos plenamente conscientes que el orgullo muchas veces se ceba con nuestras almas y que nos es difícil muchas veces escuchar una corrección. Hemos hablado aquí de como establecer esa corrección. porque alguien dirá _ ¡ah!, ya que estamos hablando de este tema, y ya que usted nos está diciendo que tenemos que ser como Jeremías, Valientes para decirle las cosas a las personas se las vamos a decir en la cara_ "Tu, desgraciada"... si, pero, un momento, para donde vas tu? Esa es la forma como tenemos que decir las cosas? ¿esa es la forma como tenemos que llamar a las personas a que vuelvan su corazón a Dios. No . La Palabra de Dios nos ha enseñado el valor de la corrección fraterna; nos ha invitado que el ornato de la Verdad sea precisamente la humildad y la caridad. Cosa que estaba presente en el corazón de Jeremías, que haciendo uso de aquella gracia tan extraordinaria de Dios de profecía, movido solamente por el celo de Dios por su pueblo, estaba intentando que el pueblo tomara conciencia que iba por un mal camino desde el momento en que dejaron introducir los ídolos en medio de su propia vida religiosa. osea que las palabras e Jeremías eran palabras llenas de amor, de caridad y de humildad; sin embargo, las tozudez del pueblo de Israel, la dureza de su corazón les llevo en ese momento a chocar con esas palabras.

Cuando una persona te esta intentando llevar la verdad y tu tienes el corazón endurecido, tu quieres acallar la voz de esa persona, que esa persona no te diga nada, que se calle. es más, si no está: mejor.
como dicen por ahí algunos: "no te escucho, soy de palo y tengo orejas de pescado!...
Es la forma de decir en un determinado momento con la que rechazamos tajántemente que alguien quiera iluminar nuestro camino.por eso es tan frecuente en el Antiguo Testamento que el pueblo Israelita, por la dureza de su corazón, a todos sus profetas los machacaran y los mataran.
esa circunstancia lleva a que los príncipes de Israel, ya aburridos y cansados de las apalabras que decía Jeremías, "No hagáis batalla contra vuestros enemigos, la ciudad va a caer, os va a ir mal" ya estaban cansados de oír aquello. no aceptaron lo que Jeremías les dijo argumentando haber escuchado la voz de otros profetas que les afianzaron en la obstinación de mantener el orgullo de Israel que se basaba en mantener la batalla y luchar con las propias fuerzas contra el enemigo. ellos prefirieron hacer caso  a esas voces, no midieron el alcance de su propia fuerza y por eso querían acallar al Profeta.
Finalmente van donde el rey Sedesías, que el pobre, con todo el rollo que tenia en su cabeza no sabia que hacer y en lugar de ser fiel a la verdad que el tenia, porque se decía que escuchaba a Jeremías, le tenia en buena estima.muchas veces algunas palabras que salían de la boca de Jeremías, el rey Sedesias intentaba escucharlo en la intimidad, lo llamaba sin que nadie se diera cuenta. 
¿A quien nos recuerda ésta actitud?. Alguien que a escondidas iba a escuchar a Jesús. A Nicodemo. Pues, algo así era lo que pasaba entre Sedesías y Jeremías. sin embargo cuando vio que todos los príncipes del pueblo, las personas mas influyentes se lo querían cargar, el rey Sedesías se muestra incapaz de defender al profeta: _"hagan con el lo que ustedes quieran porque prácticamente ustedes son los que mandan"_ entonces se deja llevar por la cobardía, por los respetos humanos. entonces viene unos príncipes y meten a Jeremías en un pozo que estaba lleno de lodo, con lo cual lo podríamos ver en medio de un charco fangoso con el lodo hasta el cuello, a punto de entregar su vida por fidelidad al mensaje que había recibido de Dios. en ese momento surge un personaje de palacio de origen etíope y este hombre intenta crearle conciencia al rey Sedesías _ "Haber rey: os dais cuenta que lo que esta pasando con el profeta Jeremías es una injusticia, que ha sido tratado de una manera ignominiosa? ¿es que acaso no vais a ser justicia, vos que sois el rey de Israel?. en ese momento, parece que el rey entra en conciencia y dice: "claro, he tomado decisiones motivado por todo lo que las medas personas querían que hiciera, por los falsos profetas, creo que en este momento tengo que hacerle caso a mi corazón, ve con otros tres hombres y por favor saca a Jeremías de ese charco fangoso.
Es curioso, el salmo que hemos escuchado en el día de hoy "Señor. date prisa en socorrerme" es una muestra de alguna manera , en medio de una circunstancia, parece que Dios defiende la causa de los justos y de una u otra manera, la fidelidad y la permanencia en la verdad es escuchada, quizás no por los tribunales de éste mundo, pero si por el tribunal Divino y el Señor hizo justicia a Jeremías. 
Es la confianza del salmista que dice en aquel momento: "si tu permaneces fiel a la verdad, si eres constante y perseverante en medio de la dificultad, en medio del camino que Dios te ha escogido, aunque sea signo de contradicción: Yo vendré y te socorreré. yo vendré y seré tu auxilio en medio del peligro" Esa es la confianza que nos debe llevar a considerar el valor de la fidelidad dentro del cumplimiento de la voluntad de Dios en nuestra vida.
Hemos escuchado en la carta a los hebreos un texto también muy particular, estamos dentro del discurso de la fe en la cata a los hebreos, nos ha hablado, lo recordaran del domingo anterior cuando recordamos la historia de grandes patriarcas que por su fe y por su obediencia a la voluntad divina, gracias a esa fe, es que se manifestó la salvación de Dios a su pueblo, gracias a su perseverancia, dice hoy la palabra de Dios. estamos rodeados por el testimonio de un montón de personas que han seguido ese camino; que no lo han tenido fácil, pero que al llevar a cabo ese camino, al ser fieles a los que el Señor les decía, se ha alcanzado prodigios de misericordia de Dios para con sus hijos. hoy a quien deberíamos mirar en medio de esa perspectiva de mirada histórica sobre aquellos que de alguna manera han sido fieles y que no ha sucumbido ante el poder de este mundo y a pesar de que su fidelidad les ha llevado, incluso, a dar testimonio con su sangre han sido perseverantes y valientes hasta el final. los santos y dentro de los santos decimos especialmente esto de los mártires. ¿estamos rodeados de estos testimonios?
Un testimonio que si lográramos profundizarlo, si estuviéramos buena estima o buena costumbre leer las historias de los santos, cada vez que llegáramos a comprender toda esa historia, nos daríamos cuenta que mas halla de los hechos extraordinarios y de las fundaciones, mas allá de la obra que realizaron en su momento, fueron testigos del evangelio de Cristo porque llevaron la Vida del  Cristo ellos mismos. y casi todos ellos, casi todos los mártires han vivido en medio de lo que significa ser una signo de contradicción en medio de este mudo. fueron valientes y perseverantes y por eso dice la palabra de Dios "alcanzaron la corona de gloria que no se marchita" en medio de esa  corona de testimonio que se encuentran a nuestro alrededor, para que sintamos animo, el Señor nos dice a nosotros _por favor os invito a entregar todo lo que os puede obstaculizar en el cumplimiento de la voluntad de Dios" que no es otra cosa que la conversión. correr la carrera que el Señor nos ha señalado.
Yo les digo una cosa: esa carrera no es una carrera llana, sino que es cuesta arriba, es el camino que el mismo Señor ha escogido. está lleno de muchas dificultades y contrariedades. es el camino del monte de la cruz. un camino difícil y exigente y si en medio de un camino así, yo tengo que cargar con todo lo que me ata, todo lo que me condiciona, eso hace de aquel camino algo tortuoso y agobiante, difícil de recorrer, nos cansaríamos apenas al empezar. no seríamos capaces de perseverar y ser constantes. por eso, cuando tenemos peso en nuestros corazones. si de alguna manera somos consientes de esa realidad debemos pedirle al señor que purifique nuestras almas de todo lo que impide que yo pueda con libertad de corazón adherirme a ese proyecto que Dios nos señala. hay que correr esta carrera, pero hay que hacerlo con libertad e corazón, hay que desprenderse de lo que nos ata y fundamentalmente esto es el pecado. Hay que pedirle al señor que nos purifique y que no nos permita vivir en el engaño, que abra nuestros corazones a la acción de la verdad, a la acción profética de la Iglesia, que no se endurezca nuestro corazón,porque muchas veces cuando nos hablan los profetas de nuestro tiempo, cuando nos habla la Iglesia, nosotros, lo que hacemos es endurecer y cerrar el corazón porque somos necios y tercos. El Señor nos dice hoy que no. no cometáis ese error, correr con libertad, os daréis cuenta de lo maravilloso que es recorrer este camino que ciertamente es arduo, pero que ya tenemos a uno que lo ha recorrido primero que nosotros, por eso hay que poner fija nuestra mirada en Jesucristo. porque solo quien pone la mirada en el recibe la gracia, el don necesario para nunca dejar abandonado el proyecto de Dios por la falta de animo, porque, de lo contrario, si nos miráramos a nosotros mismos, continuamente ¿que nos pasaría? lo que le pasó a Pedro en las aguas del mar de galilea: dejaríamos de ver a Jesús y lo que a Pedro, a nosotros también nos ocurrirá: Pedro se hundió. 
Es necesario que frente a la exigencia de este camino que no podemos recorrer con nuestras propias fuerzas, dirijamos nuestra mirada a aquel que nos puede conceder la gracia, el don del amor, el don de la perseverancia y al constancia para llegar hasta le final, hasta done el llegó, hasta la cruz, una cruz que en ningún momento se nos presenta como algo pesaroso, sino que se nos presenta adornada con la gloria de su vida y de su resurrección. pero es necesario recorrer. por tanto, dice la carta a los hebreos: recobrad el animo. el que se encuentre decaído y desilusionado, en plan _hay es que yo no puedo, que difícil que es, yo en que momento me metí en esto_ a quien está viendo: a sí mismo. y por tanto, si queremos realmente recorrer este camino con esta constancia y perseverancia, necesitamos que Dios nos ayude. porque precisamente nos mira con amor.
¿Ustedes creen que cuando el Señor nos mira lo hace diciéndonos, _Oye. que incapacitado, que trasto, madre mía!_¿será que el Señor nos mira así?_ ¡NO!. El Señor nos mira con amor. al decaído lo mirará y le dirá: Mírame a mi; mira mi Corazón. es lo que yo te quiero transmitir, lo que yo te quiero comunicar: déjame actuar en ti, solo de esa manera llegaremos hasta el final y nos dice:porque todavía nos habéis llegado a la sangre. no has llegado a la sangre en medio de este testimonio. ¿quienes han llegado hasta allí? Los mártires de nuestra fe. ellos han llegado hasta las ultimas consecuencias, en medio de lo que significa el recorrido de esta vida. y a pesar de que no todos estamos llamados a ese tipo de martirio, si que estamos llamados a un testimonio que llamamos: martirio blanco; el de todos los días. porque en ese proceso de identificación con Cristo, de caminar junto con Él; evidentemente vamos a encontrar muchas resistencias y dificultades. va a ser una martirio de cuenta gotas.
cuando nos encontremos ante la dificultad, que los grandes enemigos del alma: le mundo, la carne y el demonio, cuando estemos ante ellos, vamos a tener oportunidad para dar testimonio y para morir a nosotros mismos en medio de esas experiencias. es de lo que nos habla hoy la Palabra de Dios en el Evangelio.
_¡FUEGO!_
Dice el Señor: Fuego he venido a traer a la tierra y ansío que ya esté ardiendo ese fuego. el Fuego, en el sentido bíblico de la palabra, es purificador, acrisola, hace posible que las impurezas se diluyan. entonces, el fuego que ha sido derramado en la Iglesia es el Fuego del Espíritu Santo, el Don de Dios, el Amor de Dios que purifica el corazón del Hombre. este es el fuego que ha venido a traer, el ha venido a purificar nuestro corazón, ha darnos la libertad necesaria para poder recorrer su camino, pero el señor mismo reconoce que esa gracia extraordinaria que quiere derramar en la iglesia, es algo que nos hace pasar inevitablemente por un proceso de purificación. tengo que pasar por un bautismo ¿cual es el bautismo? ya había pasado lo del Jordán ¿de que bautismo nos hala? de su misterio pascual: pasión muerte y resurrección. Experimento angustia frente a eso. ¿por que es angustioso? porque tiene que entregar la vida en una circunstancia que nosotros no podemos asumir tan fácilmente. imagínate entregar la vida el que es justo por todos los que son injustos. "Alguno, _dice la Palabra de Dios_ ¡caso haría algo por alguien que fuera bueno? estaríamos dispuestos realmente a entregar nuestra vida por una persona buena. si lo llega a haber, dice el señor en la palabra " hay quien esté dispuesto a sacrificarse por una persona buena ¿cual de vosotros estaría dispuesto a sacrificarse por una persona no tan buena?... la vecina esta, la bruja criticona que me juzga y que me tiene hasta aquí ¿estaría yo dispuesto a entregar la vida por esta bruja?.
¿Estaría yo dispuesto?, claro, eso se experimenta como algo que nuestra carne rechina, no es fácil hacer un acto de entrega por una persona que no contribuye en ningún beneficio para mi. ¿me han entendido? para el Señor su bautismo pasa por una experiencia angustiosa que la asocia a nuestra propia experiencia humana ¿ustedes creen que Dios no considera que para nosotros este camino es difícil? él mismo en su humanidad nos ha dado muestras de que realmente es una circunstancia que nos pone a prueba ¿cómo estaba el Señor en el huerto de Getsemani? ¿creen que estaba orondo y relajado, distencionado e indiferente a todo sentimiento esperando al momento del cruz como quien espera presentarse a un show? él lo experimentó con angustia, sudó gotas de sangre, sabiendo el alcance de un proyecto que superaba enteramente cualquier fuerza humana. solamente con la ayuda de su Padre, de su ABBA de la gracia que estaba presente en su corazón es posible hacer un acto de amor supremo, heroico, capaz de entregar la vida por la salvación de los suyos, por eso es el signo de contradicción. se convierte en el signo de su cristianismo.
¿Creen que he venido a traer paz a la tierra? el Señor lo dice dos veces en su palabra y lo decimos en la Santa misa "la paz os dejo, mi paz os doy" momento que precede la paz que nos damos aquí nosotros en la Iglesia. alguien dirá: ha llegado el momento de la paz. _¡hayy. Aquí esta el signo de paz!, y ahí esta la bruja esa.. uuuhhhh_... la paz.
Es curioso ¿cual es la paz que el señor nos ha vendo a dejar que dice: es distinta a la paz del mundo? ¿que será la paz? ¿el equilibrio en medio de las fuerzas que se oponen en medio de las situaciones de la vida? será fruto del equilibrio de las fuerzas que chocan unas con otras? ¿será la imposición de l mas poderoso frente al mas débil? ¿será la paz, la serenidad e no tener problemas? (cosa que de por si es completamente fantasiosa y que muchas veces la paz que anhelamos....
... _hay yo quisiera tener una paz, por ejemplo, no estar con mi mujer, (que eso ya....) estar en las islas Fiji, en una playa, con un mojito: hay! que paz, que paz tan maravillosa! ¿creen que esa es la paz de la que nos habla el Señor hoy? No. no crean que he venido a traer paz de esa manera, sino división...
_ ahhhh!!!!, que Jesucristo diga que ha venido a traer división es escandaloso!!!!. Él que ha venido a anunciar el reino del amor, de la justicia, cómo va a a decir que ha venido a traer división, pero no es en el hecho de que el divida, pues quien divide es el diábolos cuya expresión significa que divide, vale? pero Jesucristo no ha venido a traer división en ese aspecto, no ha venido a enfrentarnos los a unos a los otros, desde el odio, desde el resentimiento y desde el egoísmo; cuando el habla de la división que se da "que de ahora en adelante una familia de cinco estarán tres contra dos, dos contra tres, que los padres tendrán problemas con sus hijos y ellos con sus padres, que las madres con sus hijas y ellas con sus madres... entonces, la suegra y la nuera: eso ya lo supera todo.... ¿por qué será esta división? será no como consecuencia de una semilla de odio, de discordia y de orgullo; todo lo contrario, porque se siembra la semilla del evangelio de cristo y en ese momento la exigencia del evangelio genera inmediatamente una resistencia, una dificultad en la convivencia. muchos aquí en sus familias han experimentado esta dificultad:
_para adonde va, mamá? _ voy a misa. _ Pero como eres de exagerada! ¿acaso ya no has ido a misa este mes? pero que exageración...
_Voy a rezar el Rosario.... _ (los demás de casa mofándose) _jajajaja a rezar el rosario jajajaja....pero que es la tontería que estas haciendo"
Es mas, hay unas personas que son capaces de abordarte y decirte: _ te están comiendo el tarro_ o no? incluso desarrollar rabia e ira contra ti como consecuencia de tu propia fidelidad al evangelio de Cristo. mi pregunta es: ¿frente a esos signos de contradicción qué vamos a hacer? ¿vamos a ser cobardes y a ceder con lo que la mayoría te sugerirían que hicieras? porque es que todos los demás... piensen por ejemplo la dificultad a la que están sometidos nuestros jóvenes: ¿que tienen ellos en este momento? tienen a su alrededor un mundo muy peculiar que exige en todo momento la inmediatez de la satisfacción de muchos ídolos que fundamentalmente lo que quieren hacer es llenar el vació del corazón llevándolos por el camino de la desgracia y del sufrimiento, que es algo que es completamente (perdonen la expresión) Diabólico para la juventud de nuestro tiempo. todo a su alrededor, absolutamente todo les mueve a eso: el colegio, las amistades, absolutamente todo tiende a ello ¿que deberían hacer ellos? ¿ser signos de contradicción? ¿ser fieles y valientes en medio de esa perspectiva y decir: _No. Yo voy a seguir a Cristo_ ¿que van a decir de Pablito, de todos vosotros:
_No. quitar a esas chicas que vienen aquí: No. yo voy a seguir a Cristo_ que dirían todas esas chicas ¿pero que te pasa? ¿algo le pasa a este chaval? ¿estas loco? y dice Pablo: No. soy fiel al Señor. ¿esto es fácil?. debemos entender que para ellos, en este momento soportar toda esta avalancha de distracciones es un verdadero martirio. hoy nuestra por nuestra juventud debemos experimentar una enorme compasión y debiéramos estar prestos a ayudarles en medido de los que significa actualmente el testimonio de fidelidad de la iglesia ante lo que es el anuncio del Evangelio de Cristo. Lo tienen difícil, ¿pero ellos, solamente? vayamos a nuestros lugares de trabajo, a la universidad: haber si es fácil decir:
_¿para donde vas?
_a.... a.... a la montaña.
_¿y que vas a hacer en la montaña? caminar? ¿hacer ciclomontañismo? ¿senderismo? vas a ver los ¿pájaros?, ¿la naturaleza?
_No. Voy a..... voy a la Luz.
_¿A la luz? y qué vas a hacer allí?
_ pues, voy a (en baja voz) a misa.
_¿A misa?... pero... huyyyyy

...Cuantos son apartados, juzgados, cuantos son considerados tontos, estúpidos, pringados; cuántos son considerados menos por consecuencia de su fidelidad al evangelio y cuantos han experimentado en su corazón un:
_¿será verdad? ¿será que allí me están engañando y yo estoy desaprovechando todo lo bueno que me ofrece la vida?_
_Encima de todo ¿no ves la cara de amargados de las monjas y de los frailes? ¿no ves a las viejas que salen de la misa?
esto y el montón de prejuicios que  podemos escuchar hoy en día acerca de lo que es Dios, la Iglesia, los sacramentos... ¿estamos dispuestos a ser signos de contradicción? ¿O, vamos a seguir en la cobardía, permitiendo que sea el mundo que rija las decisiones de nuestra vida?
_Padre: pero eso es difícil!
recordar que la carta a los hebreos ha dicho en el día de hoy: Mirad al Señor y reconocer en él en primer lugar que es el primero que lo ha vivido en su propia vida dándonos ejemplo de ello. sobre todo, para que nos nos venga a nosotros la tentación cuando se acercan todas esas personas que nos ponen el pie para que tropecemos, que nos intentan chinchar... basta simplemente que respondas ante una provocación y de inmediato, con sutileza te sacan un _ Ja! y va a misa, y reza el Rosario y mírelo, (mírela)!... Y claro, eso es una estocada a la yugular. Entonces, ante esa realidad, ante esa circunstancia no debemos caer en la tentación de responder a las provocaciones... ante las personas que continuamente están halando mal, no debemos tomar una actitud de juicio. ante esas personas no tenemos por que personarnos de esa realidad pues, en realidad lo que el mundo persigue con odio es a Dios. Por eso, debemos sentir, mejor, compasión y misericordia por esas personas.
Cuando alguien por alguna razón ofenda tu fe y condicione tu experiencia de Dios: no te enojes. no respondas con rabia, porque estas perdiendo en ese momento toda la autoridad moral que Dios te da por seguirle. Mejor, reza y pide la conversión e ellos que es lo que en este momento tiene que ser la fuerza de la Iglesia; una Iglesia que ora y se sacrifica, precisamente por la conversión de aquellos que no creen en Dios y que no aceptan este camino. Las fuerzas que se ciernen sobre el mundo son grandes y fuertes, pero no mas fuertes que el amor y la gracia de ese fuego purificador que el Señor ha enviado a la Iglesia, que es el Espíritu Santo.
¿Confiamos en el Señor?
¿Confiamos en que el Señor nos dará la fuerza, nos dará las palabras adecuadas, nos ayudará a guardar silencio cuando tengamos que callar ante la terquedad de este mundo?

Si estamos dispuestos, el Evangelio de hoy nos puede llevar a encontrar la verdadera paz de tu corazón. porque cuando tu descansas en la verdad, cuando, de alguna manera, en medio de la circunstancia recibes de parte del mundo ese ataque, normalmente si en tu corazón reina Dios, absolutamente nada condicionará el hecho de que puedas llevar a cabo se proyecto que Dios tiene para contigo. ¡Nada!
Mirad al Señor. Miradlo en la Cruz que sacó fuerza, incluso para perdonar a sus verdugos "Padre. perdónalos porque no saben lo que hacen. en tus manos encomiendo mi espíritu"
Vamos a pedirle especialmente esa gracia al Señor: que tengamos la valentía adquirida a través del encuentro personal con el señor, a través de la oración.
¿que deben hacer ustedes cuando se sientan débiles y frágiles?_ ¿Llorar? _ eso no resuelve nada.
¿pelear con los que no están de acuerdo a tu alrededor? _ tampoco resuelve nada. ¿huir?_ tampoco resuelve nada.
si se sienten débiles, frágiles, si creen que es difícil ese camino: recurran al Señor para que Él les otorgue la fuerza necesaria para llegar hasta el final como Él lo hizo. Que, aunque cayó (porque aveces nosotros también nos caemos.somos frágiles y débiles) se levantó y siguió adelante para llegar al final.
sed fuertes y valientes de corazón. nos diría la Palabra de Dios en el día de hoy. Sed Fuertes y Valientes y dar testimonio de nuestra fe sin miedo en medio de un mundo que necesita hoy el testimonio de la Iglesia.
hoy la Iglesia necesita tener la capacidad de decir: _¡Si! soy de Cristo._
la convicción puede cambiar de manera definitiva la vida de muchas personas a tu alrededor. depende de ti, de tu corazón de tu libertad y de tu "si"
vamos a pedir la gracia de no temer a los respetos humanos. no acobardarnos por lo que nos puedan decir allí afuera.


Por el Padre Francisco.


domingo, 11 de agosto de 2013

ATENTOS Y VIGILANTES

Tenemos en la primera lectura un libro sapiencial. es un libro que recoge la sabiduría de los grandes sabios de Israel. Los que supieron hacer una lectura espiritual de los acontecimientos, que tuvieron lugar a lo largo de la historia del pueblo israelita. en eso consiste el libro de la Sabiduría. Estamos al final del Libro de la Sabiduría, el último capitulo, el capitulo XVIII, en el cual, el autor sagrado viene a decirnos una reflexión sobre una parte de la historia del Pueblo de Israel; que es: (...) (la primera lectura que hemos hecho; les doy pistas; sería bueno, Habla de una noche memorable, en que fueron liberados los israelitas y fue condenado el enemigo). ¿De qué día hablamos? (que me responda solo uno: !madre mía de mi alma!) ¿de que noche estamos hablando?: de la noche de la pascua. ¿Recuerdan el contexto en el que nos situamos? ¿el pueblo Israelita en dónde estaba? (...) _ En Egipto_ Estaban esclavizados por los Egipcios, estaban siendo, digámoslo así: machacados por ellos. Recordemos que cuando hemos hecho reflexiones en torno a este acontecimiento en la historia del Pueblo de Israel, recordamos que Egipto simboliza la realidad del pecado, lo que esclaviza al hombre, lo que le merma, lo que le quita su propia dignidad; pues, es la circunstancia que está viviendo el pueblo en aquel momento. Dios interviene a través... por las suplicas del pueblo que le pide necesitada al Señor, le pedía que por favor se apiadara del pueblo y el Señor responde suscitando a un gran caudillo ¿que fue?... (Madre mía cómo estamos en Historia Sagrada): Moisés. Moisés es el caudillo que Dios escoge para ir allí y presentarse ante el faraón y pedirle que por favor le permitiera salir con su pueblo al encuentro con Dios en el desierto, en el monte santo ¿en el monte? (ahora responden más, ya vamos mejorando): En el monte Sinaí. Muy bien ¿el faraón le deja ir?: para nada. el faraón no les deja ir, por eso es que Dios interviene con signos y prodigios para que el faraón pueda decidir realmente dejar salir al pueblo de Egipto y ahí es donde vienen las plagas, entonces el libro de la sabiduría ne estos últimos capítulos se dedica a hacer una lectura espiritual de ésos acontecimientos, de las plagas de Egipto; en el capitulo XVII vamos precediendo un poco la lectura de hoy: habla sobre la plaga de la oscuridad. es una reflexión muy interesante: dice: aquellos, los egipcios que sometían al los israelitas a la esclavitud fueron sometidos a una gran penumbra, a una gran tiniebla, en la cual experimentaron temor... experimentaron angustia y  desesperación, mientras que Dios se manifestaba a su pueblo y Él era para ellos como un sol de justicia, como un sol radiante que les permitía poder seguir su camino. es una reflexión muy bonita acerca de lo que es esta plaga y finalmente, al principio del Capitulo XVIII del libro de la Sabiduría, habla de la última de las plagas que llamamos así, ¿que fue cuál?: la muerte de los primogénitos de Egipto.
Empieza diciendo el libro de la Sabiduría como en aquel momento, en aquel tiempo, los Egipcios en su momento quisieron diezmar  a los israelitas ¿recuerdan como?: cuando quisieron matar a los hijos de los Isralitas ahogándolos en el Nilo. Pues, Dios, de esa misma forma, de alguna manera manifiesta su voluntad salvífica obrando, pues, esta circunstancia; diezmando a los hijos de los Egipcios y dice: sepultándolos en el mar, porque recordemos ese acontecimiento por el cual los Egipcios quedaron sepultados en el mar rojo, siendo un signo muy elocuente... ¿de cuál sacramento? Del Bautismo, que nos otorga a nosotros la salvación y la liberación de nuestro pecado ¿OK?... Bueno, ¡muy bien!. Haciendo esta reflexión el autor sagrado habla de la actitud y la disposición de los israelitas en aquel momento, en una noche memorable, no menciona que sea la noche de la pascua pero lo identificamos por el contexto: "en aquella memorable de la pascua". Aquella noche en la cual los israelitas les fue anunciada la salvación que Dios iba a obrar. en aquel momento los Israelitas, llenos de una inmensa alegría por lo que Dios iba a obrar en su pueblo, tomaron la actitud de esperar y confiar en el cumplimiento de la promesa de Dios y por eso, en esa firme esperanza, decidieron ofrecer un sacrificio ¿recuerdan el sacrificio... de quién? _del Cordero Inmolado_ cuya sangre puesta en el dintel de la puerta hacía que el paso de Yahvé por aquel sitio de la pascua, pues liberara a los israelitas e aquella ultima plaga ¿y cómo estaban los Israelitas en aquel momento? Estaban cenando ¿pero cómo estaban? con la cintura ceñida, con las sandalias en sus pies, listos y preparados para salir al desierto, al encuentro con Dios. Dice la Palabra de Dios en el libro dela sabiduría: "Cantaban Himnos y cánticos en ese momento al hacer la acción de gracias a Dios, al ofrecer el sacrificio". un signo muy elocuente para lo que nosotros... ¿que es? ¿en qué momento también nosotros hacemos un sacrificio, la ofrenda de un nuevo cordero, cantamos himnos y acción de gracias para obtener la salvación? _En la M-I-S-A. 
En la Santa Misa ¿Cuál es el Cordero que se ofrece? _ El Cordero Inmolado de la Nueva Alianza. ¿Quién es? _ Jesucristo_ Nuestro Señor es ofrecido al Padre, es ofrecido para que, a nosotros nos sirva de salvación ése ofrecimiento; la victima perfecta para la remisión de nuestras faltas y pecados; también nosotros somos en éste día memorable, de éste recuerdo de aquella Noche Santa de la Pascua, estamos aquí con la misma actitud de los israelitas ¿cual es esa actitud? _alegres en la esperanza y confianza en el cumplimiento de las promesas de Dios. ¿así el Domingo venimos a misa? ¿he?. (pues, yo vengo porque me toca venir a misa los Domingos) ¿así venimos a misa hoy? has venido con tu corazón abierto de par en par al Señor, con la firme esperanza de que verás en tu vida, a tu alrededor, verás el cumplimiento de las promesas del Señor. por eso hemos venido a ofrecer este Santo Sacrificio de Alabanza a Dios nuestro Padre, cantando himnos y cánticos, allí, con la Hermana para darle gracias a Dios, al Señor y de esa manera obtener la salvación que Dios nos ofrece... "En verdad es digno y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias, siempre y en todo lugar, Señor Padre Santo, Dios todo poderoso y eterno" Entonces: ¿cómo está nuestra fe, cómo está nuestra actitud? porque algunos venimos tristongos, ¿no? un poco tristongos, un poco así como cabizbajos, con muchas preocupaciones y angustias, seguramente cerrados en nosotros mismos como consecuencia de los problemas, de las dificultades; con una actitud, muchas veces, que, como consecuencia de esa realidad, pues, nos lleva a chocar inevitablemente y a hacer muy agrestes en nuestra relación con los demás. que no nos soportamos ni a nosotros mismos: nos miramos al espejo y... (¡grrrrrrrrrrrrrr!)No nos soportamos ni a nosotros mismos, ya. entonces, El Señor quiere hoy, en primer lugar, llevarnos a comprender, dentro de la naturaleza del cumplimiento de sus promesas, si tenemos la misma actitud de encuentro, si estamos, éste momento preparados, bien dispuestos para ofrecer éste Santo Sacrificio de la Nueva Alianza. ¿OK?. Es muy importante lo primero, ahí es donde realmente vamos a empezar a examinar cómo está nuestra fe, cómo está nuestra esperanza, cómo está nuestra caridad. ¿OK?.Éste libro de la sabiduría: excelente. este texto que hemos escuchado en el día de hoy para situarnos ante esa perspectiva ¿OK?.
En la segunda lectura, que la hemos tomado de la Carta a los Hebreos, que ya es del Nuevo testamento, tenemos otro texto maravilloso de literatura sapiencial, pero esta vez, de la Nueva Alianza, en la escuela Paulina. (se dice, no se tiene muy claro si esta ultima carta es de San Pablo o de alguno de sus discípulos; no se tiene muy claro en la Carta a los hebreos, pero tiene su teología, entonces, por eso está dentro del corpus paulino, osea: dentro de las cartas de San Pablo. entonces, en ésta carta a los hebreos, a partir del capitulo once, se nos hace una reflexión muy bonita acerca de lo que es la fe. ese es el tema fundamental ¿ya?. Entonces se nos viene a decir si realmente nosotros abrimos nuestro corazón a Cristo, que es el fundamento de nuestra fe y si a través de esa perseverancia en la fe, nosotros alcanzamos el fruto de lo que esa fe nos quiere ofrecer. "el justo vivirá por la fe". ¿ya? entonces, para ello, en la carta a los hebreos se nos pone el ejemplo de unos personajes de la Palabra de Dios, cuya actitud, cuya disposición, nos permite a nosotros entender cual debe ser la respuesta de nosotros de cara al cumplimiento de las promesas de Dios en nuestra vida... entonces, en éste capitulo se empieza a hablar, en primer lugar de Abél. Abél, que ofreció un sacrificio agradable al Señor (en vez de su hermano que era un poco tacaño) ¿no?. Ante ese sacrificio agradable en que Abél ofreció lo mejor de los frutos de la tierra, ante ese sacrificio, Dios le concedió a ese corazon... le justificó. Pero ¿por qué Abél ofreció ése sacrificio? porque él creía; por la fe en el Señor. Habla luego de Enoc... (algunos ponen cara de... ¿de quien?) Enoc: otro personaje del Antiguo Testamento... de los que llamamos patriarcas pre-diluvianos (antes del diluvio)... nos habla de Enoc y nos dice cómo Enoc, tambíen, siendo un hombre justo a los ojos de Dios, fue arrebatado al cielo. Dios le concedió de alguna manera, digamos, le concedió la gracia de poder demostrar en su corazón aquello en lo que creía. luego habla de Noe, de cómo Noé por la fe en el Señor construyó el arca. (porque hay que tener fe para construir un arca).. construyó el arca y se salva él y su familia. y de esa manera obtiene, a través de la intervención de Dios en el diluvio, pues, evidentemente, la gracia y el don del amor de Dios. ¿ya? y luego empieza a hablar de los patriarcas y ahí es donde estamos escuchando el texto del día de hoy en donde nos habla de la fe de Abraham, de Isaac y de Jacob. estos tres grandes patriarcas del Antiguo Testamento, de la construcción del pueblo israelita. por la fe Abraham dejó su tierra, donde él estaba, en Ur de los caldeos. dejó su tierra y se fue a donde Dios le señaló que fuera para ser depositario de una tierra prometida. que es la tierra que Dios le prometió a Abraham ¿sabía para dónde iba? solo fiado en la palabra de Yahvé, solo fiado en la Palabra de Dios, Abraham recorre un camino y llega a la tierra de Canaan, la tierra de la promesa y allí vive como extranjero, en tiendas, esperando el cumplimiento definitivo de la promesa del Señor. y ¿Vio ese cumplimiento realizado? ¿el cumplimiento de la promesa?. _No_ Abraham, Isaac y Jacob murieron esperando el cumplimiento de esa promesa, pero con la firme esperanza de que Dios cumpliría lo que Él mismo les había anunciado ¿ya?... porque ésa ciudad iba a ser edificada por Dios, no por manos de hombres. porque en ésa empresa, la eficacia... en esa empresa, llevar a cabo todo eso que se esperaba, ¿de quién dependía?: De Dios. Ellos confiaron en el cumplimiento de ésa promesa y murieron esperando el cumplimiento de esa promesa. por eso dice el Señor en el Evangelio: Si Abraham, Isaac y Jacob estuvieran aquí, estarían mas que contentos porque verían el cumplimiento pleno del designio amoroso de Dios para con su pueblo. ¿OK? ¡Muy bien!. Zara, contra toda esperanza, siendo anciana, recibió la gracia de tener a un hijo, a Isaac, que es depositario, también, del cumplimiento de una promesa de Dios: la descendencia tan grande como las arenas del mar y como las estrellas del cielo: por la fe, por la confianza; al cimentar la base solida del corazón en Dios; digamos, aun muriendo, confiaron plenamente en el cumplimiento de esa promesa y la promesa era de una tierra. Cuanto más, dice el autor sagrado de la Carta a los Hebreos, cuanto más si estamos hablando de la promesa... ¿cuál? ¿cuál es la promesa para nosotros? ¿cuál es la tierra prometida de la Nueva Alianza?: El cielo. cuanto más si de lo que estamos hablando es de la promesa de la vida eterna, de la bienaventuranza de la vida eterna; De lo que sería la participación de la vida de Dios; de aquello de lo que tiene realmente sed nuestro corazón. Y termina diciendo la Carta a los Hebreos "Mirad la fe de Abraham, que Dios le pidió que sacrificara a su hijo, ¡a su único hijo!, al depositario de la Promesa; le dice que lo ofrezca al sacrificio. y dice el autor sagrado: parece que Abraham creía en la resurrección, creía que Dios podía devolverle la vida a su hijo. Es una lectura teológica, una lectura espiritual; en ningún momento, en el tiempo de Abraham, Abraham pensó en esto; pero el Autor sagrado de la Carta a los Hebreos dice: "esto es figura de lo que vendría en el futuro". ¿cuál es la promesa que nos abre a nosotros la posibilidad... qué acción salvífica de Dios nos abre a nosotros la posibilidad de poder acceder al cielo?: _La Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. El ha vencido la muerte, nos ha abierto las puertas del cielo para que nosotros participemos de esa gracia. 
¿Confiamos, tenemos fe en el cumplimiento de esa promesa? ¿Tú, crees que el Señor tiene el poder para conducirte a ti hasta el cielo? (...) Yo esperaba un sí categórico como el de los...._¡Si!, Padre, confiamos... no, bueno, pues sí... ¿no?_... ¿Tenemos esa confianza? sabemos que tenemos a Uno que Aboga por nosotros, dice la carta a los Hebreos: "el verdadero mediador de la verdadera alianza que se ofrece a sí mismo para que nosotros obtengamos realmente en nuestra vida esperanza, alegría y paz. ¿confías en Él, crees en Él?.
Es exactamente lo que hoy nos plantea esta carta, la actitud, la disposición del corazón. ahora vamos a hablar a través del Evangelio que hemos escuchado el día de hoy de tres actitudes que son necesarias y que caracterizan a la persona que tiene fe, esperanza y caridad en su corazón. entonces vamos a ver cómo estamos ¿OK?.
Estamos en el Evangelio de San Lucas. Ya, el Domingo anterior nos había dado un "rapapolvo"... El Señor hablándonos de dónde deberíamos tener puesta la seguridad de nuestro corazón... qué bienes eran los que deberíamos perseguir ¿lo recuerdan el Domingo anterior?... _Es que ha pasado una semana, padre, y se nos olvidan las cosas_ Hay que poner nuestro corazón en los bienes eternos. no es que los bienes temporales sean malos, ¿ya? sino que no debemos colocar nuestro corazón en ellos; los bienes temporales que tenemos a nuestro al rededor, deben ayudarnos al cumplimiento de ése fin; no ser un obstáculo en el cumplimiento de ése fin ¿me han entendido?... Muy bien.
Entonces, ante esta realidad el Señor, empieza, hoy, a hablarnos acerca de ésa circunstancia; ¿OK?. Entonces, nos dice: "Liberad vuestro corazón, desprenderos de todo lo que os ata, dad limosna" porque, dice el Señor en esta palabra, que, "así, de esa manera podréis cosechar en vuestro corazón tesoros que no roe la polilla ni se roban los ladrones. Yo no se si alguna ves les han robado, ¿si?. bueno, a nosotros aquí en la Luz, también nos han robado. Entonces, pues, cuando te roban, ¿cuál es la sensación que te queda? _ ¡hay, me robaron la tele!. ¿qué les han robado? _¡el ordenador, el móvil! ¿que sensación nos da entonces frente a eso: un cierto sufrimiento, como una impotencia, no se; se siente mal cuando te roban. y el Señor dice: por eso, porque muchas veces ponemos nuestro corazón en estas cosas nos dan muchos sufrimientos y dolores, pero las cosas que almacenamos en nuestro corazón, nadie puede robárnoslas. nadie. Ese tesoro que nosotros albergamos... ¿cuando albergamos ese tesoro en nuestro corazón?. Cuando nosotros practicamos las obras de misericordia, cuando hacemos que nuestra vida sea para todos, fundamentalmente una expresión del amor de Dios para con los demás, cuando buscamos los bienes de arriba, cuando perseguimos en nosotros la paz, o cuando perseguimos en nosotros el cumplimiento de su Divina Voluntad. En ése momento está colmado, está repleto de un tesoro que nadie nos puede arrebatar. Por eso, ahí está puesta nuestra seguridad... si nuestro corazón tiene puesta la seguridad en ese tesoro: ¿cómo es nuestra vida? _feliz!. es más, muchos santos nos han demostrado en la Iglesia que, desprendiéndose de todo, todo, de todo lo que en algún momento los podía atar, vivían, simplemente como San Francisco de Asís, vivían simplemente alegres porque poseían todo, al poseer a Dios, lo poseían todo. En cambio cuando uno se ata a las cosas materiales y y esas cosas a lo mejor se te pierden o se te diluyen... piensen cuantas personas sufren porque en determinado momento tuvieron y ahora no tienen... que antes tenían quizás la posibilidad de disfrutar y salir... Cómo una persona que me encontré alguna vez que sufría. _¿es que tengo un sufrimiento!_ ¿que te pasa? alguna enfermedad; _no, no, es que no podemos salir de vacaciones éste verano!_ (...) ¡qué morro! ¿cómo vas a sufrir por eso? _ nos tocó conformarnos con la piscina del conjunto residencial_ ¿Han visto?: ¡Un morro! un morro de oso hormiguero. ¡Madre mía de mi corazón!. "Donde está puesto tu tesoro allí está tu corazón". Por eso es importante que el primer y gran elemento que ayude a situarnos en la perspectiva del cumplimiento de la promesa de Dios, que nos habla del cielo, es que tengamos nuestro corazón puesto en esos bienes que son los que debemos atesorar. ¿Atesoramos tesoros para el cielo? ¿o tenemos un pequeño carrefour en nuestras casas? porque, muchas veces la gente cuando tiene vacío el corazón necesita consentirse, necesita de alguna manera, como sentirse bien consigo mismo, ¿y qué hace? Se compra cosas. Hay personas que son compradoras compulsivas porque es la única forma de sentirse agradados en algo. El materialismo es muy fuerte en nuestra sociedad, muy fuerte... por si no se han dado cuenta. Es importante esto: vivir en el desprendimiento de las cosas.
Escuchen todos los mensajes que el Santo Padre está dirigiendo a la Iglesia; en todos los mensajes nos está hablando, en gran medida, de ese desprendimiento de corazón ¿no se han dado cuenta? ¿han seguido las palabras del Santo Padre?.... muy importante, muy importante desprendernos. ya te digo: es fundamentalmente darle libertad a nuestro corazón; es pensar, realmente, que... ¿dónde está tu morada?... y cuando tu te vayas de éste mundo, podrás llevarte la moto de Sky náutica al cielo? ¿el parapente? ¿te podrás llevar alguna de tus casas? (¿la de murcia, la de la playa, la del interior, la de Madrid?).... ¿te podrás llevar algo de tu cuenta bancaria? ¿te podrás llevar tus títulos? ¿te podrás llevar la vajilla de murano? ¿te podrás llevar tu colección de camisas top Mc Flynder? ¿te podrás llevar todas estas cosas?... "Desnudo viniste a este mundo, desnudo te irás de este mundo" aunque te pase, ¿no?, como a muchos en la antigüedad, muchos, se enterraban con todas sus posiciones; hasta con sus criados... Han encontrado los cementerios donde están allá, los pobres, sentados allí, porque pensaban que con la muerte había un viaje en el que te podías llevar todas las cosas. solo cambian de dueño las cosas materiales y muchas veces con enormes sufrimientos vemos, muchas veces, cómo, muchos hijos se pelean entre ellos por las procesiones materiales de los padres, que seguramente, todo lo que han recogido, tenían la ilusión de dárselo a los hijos para que tuvieran un buen porvenir, una buena vida... y vemos cómo, hasta se matan unos a otros y muchas veces, incluso, son capaces de denigrar la propia vida y de irrespetar a sus padres con el fin de conseguir,por codicia y por ambición, bienes materiales. es un drama terrible lo que vemos actualmente en nuestra sociedad. 
"Atesorar tesoros para el cielo, cosechar en vuestro... y si no: ojo. os lo digo con todo mi corazón: si no cosecháis bienes para el cielo, si obráis siempre con egoísmo buscando solo lo que satisface el corazón, no, pues, a nivel de simple egoísmo, tendréis un vacío enorme en el corazón, e infelicidad. Quien cultiva los bienes del cielo, colma y llena su corazón, le da alegría, esperanza y paz en medio del camino. Entonces, es lo que tenemos que ver: ¿cómo están las cuentas bancarias del cielo? ¿cómo están? ¿igual que las otras? ¿en rojo?... que estamos.... ¿no? ¿están en rojo?. 
Primera reflexión del día de hoy, de este Evangelio que hemos escuchado: Ambicionar los bienes del cielo y cultivarlos en el corazón _ Padre: ¿como?_ Las obras de misericordia. Cultivar el amor de Dios, hacer el bien a los demás; vencer el egoísmo, vencer el orgullo, vencer la soberbia, dedicándonos a hacer el bien, tal como nos lo ha enseñado Nuestro Señor Jesucristo en el Evangelio. "Amos unos a otros como Yo os he amado. Entonces, pongan esto en práctica, que esa es la actitud del que cree, ¿del que tiene su meta puesta a dónde? en los bienes eternos.
Segundo: El Señor dice, además de ésto, en el Evangelio de hoy: "ojo: manteneos en vela, manteneos en vela, vigilantes, porque nadie sabe cuando viene en dueño de la casa. "Ustedes... _dice el Señor_ Ustedes creen que si el dueño de la casa les hubiera dicho a qué horas viene en ladrón, ¿le dejaría abrir un boquete?. No. ya. No sabemos cuando viene el Señor. Dichosos aquellos que cuando venga el Señor... ¿cómo los encuentre?: preparados, dispuestos... _pasa, Señor_ "Os aseguro, _dice la Palabra_, que si el dueño os encuentra así, él mismo se ceñirá y os servirá" ¿que les recuerda éstas palabras?: La Ultima Cena ¿por qué? porque fue lo que hizo el Señor con los suyos: se ciñó y les sirvió. Es una muestra inmensa de lo que es el Amor de Dios para con nosotros. "estad preparados, vigilantes" ¿OK?... Esa es la segunda actitud, decía Juan XXIII: "Yo siempre tengo las maletas listas" ¿que quiere decir? que si hoy me llama el Señor; ¿hoy, cómo estoy?: Preparado, listo. si se nos cae el santuario encima ¿nos iríamos todos a la liturgia celestial en el cielo?  ¿O,hay algunos que todavía nos están preparados?... a lo mejor alguno se está diciendo a si mismo: _ bueno, yo... yo dejaré a la amante en el dosmil catorce..._ ¿no? iré preparándome para... ¿y si el Señor te llama? ¿recuerdan el Evangelio en el que el Señor habla del Hombre necio que cultivó una gran cosecha y empezó a hacer cálculos... "voy a hacer una casa para poner, pues, toda la cosecha, y luego, disfrutar y comer y beber: ¡Necio! El Señor te llamará ésta noche. 
Entonces; nosotros estamos preparados... muchas veces, tenemos muchas cosas que debemos cambiar en nuestra vida, en nuestro corazón; que sabemos, a lo mejor, nos hemos hecho esas propuestas: _si, tengo que cambiar esto, tengo que cambiar aquello, que yo con mi lengua viperina, habla de todo le mundo y tal; que soy mentiroso y que soy impuro, y que soy... ¿cuándo piensas cambiar eso? ¿cuando vas a empezar a trabajar tu corazón? (...) _!Es que no se, es que, en verano da una pereza¡. En otoño_ ¿y cuando llegue Otoño: ¿que vas a decir?. _ ¡hay! en navidad_ y cuando llegue navidad ¿que vas a decir? _En Semana Santa_... y así se te va la vida. siempre será: después. las cosas de Dios siempre son para después. pero las cosas de este mundo, tenemos el empeño, casi siempre, y la disposición para hacerlas ya. Entones debemos ser conscientes de ello, no debemos seguir esperando a que pase algo para poder tomar la actitud de buscar al Señor, de reconciliarnos con Él, de buscar el sacramento de la reconciliación; de  buscar la participación en los sacramentos, en el sacramento de la Eucaristía, que es una semilla de la eternidad, una tesoro inagotable en nuestro corazón, de cara a nuestro fin último que es el cielo. ¿OK? Hay que poner empeño. hay que poner determinación, hay que combatir el buen combate de la fe todos los días ¿tienen cara, ustedes, de combatientes? (...) o con el verano.... _¡hayyyy!. Todo lo contrario, Padre, en verano es cuando se acrecientan los vicios_.
Entonces, hay que pedirle al Señor ésta gracia, también, segundo aspecto de éste Domingo: Vigilancia, determinación, estar alerta, siempre trabajando, continuamente por nuestra salvación, sin dejar ninguna ventana abierta al mal; apartándonos de todo aquello que en determinado momento puede condicionar, realmente, nuestra vida eterna. pensemos que lo que nos estamos jugando no es cualquier cosa: es la vida eterna y la vida junto a Dios es lo que necesita el corazón. cuando se hablan estas palabras patológicas, cuando se nos habla de lo que es el encuentro con el Señor, El Juicio, y dice San Juan que seremos juzgados en el amor; hay gente que se asusta: _¡hay!, no hable de esas cosas, padre, hablar de la muerte, del encuentro con Dios, del Juicio, de las obras... ¡huy! ¡da miedo!. ¿Quién ve al Señor con miedo? El que no está preparado de corazón. ese debería temer. pero quien se encuentra preparado, ¿qué significa encontrarse con el Señor? encontrase con la vida eterna, ¿qué significa eso? ¡Lo más extraordinario que nos puede pasar! lo mejor que nos puede pasar ¿ya?
Todo lo que nos habla de eternidad, todo lo que nos habla de una experiencia de lo eterno, nos colma a nosotros el corazón ¿no os pasa los Domingos, antes de venir aquí, a participar de esta misa eterna?... Bueno... anhelo de eternidad: eso es de lo que tiene sed el corazón y tenemos que pedirle al Señor esa gracia; que nos ayude a tener esa actitud vigilante. ¿de acuerdo?... entonces, hay que poner atención, y hay que estar alertas, para estar siempre atentos a no permitir que el Demonio nos gane espacio en nuestra vida y en nuestro corazón. Alejarnos completamente de todo aquello que en un determinado momento nos puede separar del cumplimiento de la voluntad divina. siendo sabios y prudentes a la hora de escoger los medios para la realización del bien y del fin ultimo de nuestra existencia en éste momento. ¿De acuerdo? muy bien.
Y lo tercero: Pedro le hace una pregunta: _Señor, ¿eso lo dirás de nosotros, de los que estamos aquí sirviéndote a ti? y el Señor dice: _¡Hay, Pedro; hay Pedrito!: Dichoso el criado al que el Señor ha puesto al frente de su servidumbre para que les reparta la ración a sus horas_. evidentemente nosotros, los que estamos aquí estamos siendo enrriquecidos con una gracia (estar aquí es una gracia) no digo en el santuario, sino en la Misa. es una gracia extraordinaria. nosotros hemos conocido el amor de Dios, por eso estamos aquí, porque le hemos conocido, porque hemos reconocido en El Señor la esperanza de nuestra vida y de nuestro corazón. por eso El Señor, continuamente nos invita y nos impulsa a seguir sus pasos y nos da su gracia para ello. El Señor nos ha puesto al frente de su servidumbre; pero claro, nosotros, muchas veces, como El Señor tarda, a pesar de que hemos recibido esa gracia, a pesar de que hemos recibido ese anuncio, nosotros como que, nos relajamos.... nos tomamos las cosas, un poco, pues.... _Hay que tomarse las cosas un poco light, también... hay coca-cola light, hay arroz integral... nos tomamos las cosas... _no hay que exagerar tanto, ¿no, Padre?_ tampoco. entonces, aveces tomamos esa actitud, un poco como, llamémoslo así: tibia; ante la experiencia de lo que hemos recibido, ante la experiencia de lo que el Evangelio, a nosotros nos señala. ¿ya? y El Señor le dice a Pedro algo increíble, algo que nos debería a nosotros cuestionar, nos debería mover el corazón. Pues, cómo será, dice Él... ¿que terrible sería para aquel siervo que sabe lo que le gusta a su Señor, que sabe lo que el Señor le ha pedido, que no lo ponga en práctica. Si alguien no lo supiera y hubiera algo digno de ser corregido, pues, se le corrige, pero quien lo sabe, quien entiende las cosas y aun entendiéndolas y sabiéndolas no lo hace... ¿será posible? Entonces; por eso el Señor dice: "A quien más se le ha dado, más se le exigirá. a quien más se le ha confiado, más se le exigirá". _Yo no lo sabía_ Dirán algunos. _¿Y El padre Francisco no lo dijo en una homilía?... _estábamos allí y era un Domingo de verano y hacía mucho calor. Nosotros hemos recibido esa gracia, se nos ha anunciado a nosotros, se nos ha dicho, se nos ha señalado en camino para el cumplimiento de la Voluntad Dios en nuestra vida y muchas veces somos nosotros mismos los que, muchas veces dejamos caer en saco roto eso que el Señor nos dice. Yo me hago una pregunta ¿nosotros, realmente, después de venir a la misa, nos proponemos cambiar nuestra vida con la fuerza que nos ha dado el Señor a través de la propia Palabra? ¿si, realmente, nos tomamos en serio el camino de la santificación y de la conversión permanente de nuestro corazón? ¿después de la misa, realmente, salimos de aquí convencidos a luchar enormemente para que la  voluntad de Dios se realice? ¿o, nosotros, habiendo escuchado esto, muchas veces, ni siquiera lo ponemos en práctica? piensen cuantas veces pensamos: _¡Hay, si las personas escucharan lo que escuchamos aquí, si las personas se enteraran de las cosas, si penetraran realmente en el conocimiento de las verdades que que el Señor nos ha revelado ¿cuantas personas realmente cambiarían su corazón? ¿no lo pensamos aveces? ¡somos privilegiados! porque a nosotros se nos ha dado ese conocimiento. ahora, ¿qué vas a hacer con ese conocimiento?
Hay que ser perseverantes y constantes porque nosotros hemos recibido mucho. 
Una Monja, ¿cuánto habrá recibido una monja? ¿ah? ah? _!Mucho más!_ ¡cuánto habrá recibido un fraile? ¿o un sacerdote? ¿o los que participan de los distintos movimientos en la vida de la Iglesia, a través de sus múltiples carismas? ¿cuánto hemos recibido? ¿cuánto se nos exigirá?. entonces: ¿cual debe ser nuestra actitud? Una actitud de fidelidad constante y perseverante en  nuestra respuesta de fe. 
¿Tienen claras las tres cosas que nos dice el Evangelio el día de hoy? ¿si?
Atesorar tesoros para el cielo y poder todo el empeño en ello, alejandonos de todos los obstáculos que nos piden alcanzar esa gracia tan extraordinaria que es la participación de la vida de Dios. Segundo: ¿con qué actitud? Con una actitud de constante vigilancia y espera, estando listos, para que el día  que nos llame el Señor estemos contentos...
_¡Estoy aquí, Señor! el que anhela participar de ti. para que cuando nos venga la experiencia de la hermana muerte, en ese momento, a pesar de la angustia humana, experimentemos la paz de los que se saben amados y protegidos y con un montón de tesoros de obras de misericordia en nuestro corazón ¿OK? y lo tercero: como hemos sido depositarios de una gracia muy especial por el conocimiento que tenemos de lo que es la voluntad de Dios, a nosotros... se requiere de nosotros perseverancia y constancia, para que en esa perseverancia y constancia, nosotros, cuando se nos exija, estemos listos para responder ¿de acuerdo?. haremos un minuto de silencio y le pediremos esa gracia al Señor.
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo. Amén.

Por el Padre Francisco del Corazón Inmaculado de María.
Hermano de la Luz-Guadalupano

domingo, 4 de agosto de 2013

MENDIGO DIVINO DE TU AMOR

Muchas veces pensamos que el Evangelio son cosas pasadas. Es un libro que huele a viejo pero siempre florecientes, tiene unos tallos verdes que florecen  y nos dan vida. pero fijaros, ahora mismo, qué vida tiene éste Evangelio que acabamos de escuchar: Todo el problema del mundo, todo el sistema éste que se nos hunde, no sabemos lo que nos va a pasar después de todo este hundimiento, si va a ver otra guerra o no sabemos lo que sucederá pero si que tenemos que empezar otra forma nueva de vida; por supuesto! cómo está todo dibujado aquí: "Haré lo siguiente: derribaré los graneros y construiré otros mas grandes y almacenaré allí todo todo mi grano y el resto de mi cosecha y entonces me diré a mi mismo: _Hombre: tienes bienes acumulados para muchos años, túmbate  come, bebe y date una buena vida. y el Señor le dice: Infeliz, si ésta noche puedes morir" ¿Cuántos estragos, cuantas guerras, cuanta locura hay en el mundo desde la creación, casi... el único tiempo que no hubo guerra fue cuando nación Jesús y sin embargo Israel estaba bajo el dominio de los romanos, por tanto tampoco estaban en paz y había sublevación de vez en cuando pero siempre durante todos los años que llevamos desde Jesucristo no ha habido un oso día que no haya muertes, o luchas o batallas por cualquier sitio. todo porque la codicia. Yo, muchas veces pienso ¿por qué los Franceses tienen que venir una vez a quitarle a España? ¿por qué los moros tienen que venir? y van pensando: la ambición: cómo muchas veces promulgamos guerras, no porque se portan mal, sino, es que tenemos que quitarle el petróleo, o que le bajen al precio, o hacerle la guerra de la economía: todo siempre bajo lo mismo. es verdad que cuando pensamos todo esto decimos: _yo no soy así_ . Pero resulta que todos somos codiciosos, todos tenemos codicia... 
Vi el otro día una reportaje y daba una pena enorme de ver la pobreza pero al mismo tiempo la alegría inmensa de aquella gente, eran pobres, pero ¡qué ricos! y solamente tenían para comer, para llevar un pequeño vestido y nada más. tenían que beber muy poca agua, almacenar treinta litros. tenían que ir a diez minutos las mujeres, todas las mañanas por el agua y daba una pena de ver como se lavaban la cara, se bebían un trago de agua, lo echaban después sobre la mano y sobre la mano, el agua de la boca se la llevaban a la cara para llevársela y luego los veías con unas risas, con unas ganas, una simpatía. Le preguntaban a los niños: _¿Tu por qué estás aquí en el convento de los budistas?_ y decía: _Yo, porque quiero enseñarles las escrituras a mis hermanos_ Y a mi me daba vergüenza me daba rabia de ver que.. pensar que cualquier cosa deseas y lo tienes todo, solamente tenían un alimento,no tenían leña,la leña era la basura de las vacas, seca, y de las ovejas... y luego tenían la comida mas fuerte que hacían era por la mañana un vaso de te o un tazón de té con mantequilla y dormían, los niños, en el convento de aquellos budistas, dormían bajo treinta grados de frío. y son niños que llevaban solo una túnica, nada de abrigos nada mas que la túnica y luego los niños cuando lavaban la ropa, si se descuidaban un poquito ya no podían escurrir el agua porque estaba congelada, la ropa, estaba hecha como un brazo toda congelada. y veía como se divertían como disfrutaban, como hacían una fogata para ahuyentar los malos espíritus, como rezaban todos los días.. en la casa mas de una hora las escrituras budistas y me quedaba asombrado y me daba envidia y me daba ganas de irme allí y decir: voy a vivir con ellos a ver si consigo esa paz interior. todo: la codicia.
Ayer os dije que iba a traer un escrito que nos va a venir a todos muy bien y sobre todo a los hermanos, a todos en general, pero concretamente lo leo por ellos y por ellas:
Ámame como eres, conozco tu miseria, los combates y tribulaciones de tu alma, la debilidad y las enfermedades de tu cuerpo, se de tu decaimiento, tus pecados, tus carencias; por lo menos te pido: Dame tu corazón, ámame como eres. si esperas ser una ángel para entregarte al amor, no me amarás nunca, aunque caigas con frecuencia en esas faltas que no querrías cometer, aunque te canses en la practica de las virtudes, no te permito que no me ames. / si esperas ser una ángel para entregarte al amor, no me amarás nunca, aunque caigas con frecuencia en esas faltas que no querrías cometer, aunque te canses en la practica de las virtudes, no te permito que no me ames. (lo he leído por segunda vez porque es muy hermoso). Ámame como eres, en cada instante y en cualquier situación que te encuentres, en fervor o en tibieza  en fidelidad o en la infidelidad. ámame tal cual eres, quiero el amor de tu corazón, indigente. Si para amarme esperas ser perfectos nunca me amarás. ¿es que no puedo hacer de cada grano de arena un serafín de pureza, de nobleza y de amor? ¿acaso no puedo con un solo signo de mi voluntad hacer surgir de la nada millares de santos mil veces mas perfectos y mas amantes que los que he creado?¿no soy el todo poderoso? me agrada dejar en la nada estos seres maravillosos y preferir tu pobre amor.
¡Qué bonito!: "Dejar a los santos para amarte a ti como eres". ¡Qué hermoso es esto!: "Dejar todas las maravillas del mundo, todos los santos que han pasado en la historia, dejarlos ahí en un rincón, sin abandonarlos, con tal de amar tu pobreza".
Hijo mío, déjame amarte, quiero tu corazón, cuento con formarlo bien, pero mientras tanto te amo como eres y deseo que hagas tu igual, deseo ver desde el fondo de tu miseria subir el amor. amo en ti hasta tu debilidad. me gusta el amor de los pobres. quiero que desde la pobreza se levante confusamente este grito: Señor, ¡OS AMO!. Lo que me importa es el canto de tu corazón, ¿acaso tengo necesidad de tu ciencia  de tus talentos, no son virtudes lo que te pido y aunque te las diera, eres tan débil que pronto el amor propio se mezclará con la virtud. no te inquietes por ello. Yo habría podido destinarte a grandes cosas: No. Tu serás el siervo inútil y yo te tomaré, incluso lo poco que tienes porque yo te he creado para el amor. Ámame  el amor te hará hacer lo demás sin que tu pienses en ello, no busques nada mas que llenar el momento presente con tu amor. Hoy estoy a la puerta de tu corazón como un mendigo, Yo, El Señor de los señores, como un mendigo a tu puerta...
¿Qué tengo yo que mi amor procuras
que intereses te siguen Jesús mio
que a mis puertas cubiertas de rocío
pasas las noches del invierno oscuras?
Hoy estoy a las puertas de tu corazón como un mendigo; Yo llamo y espero, apresúrate a abrirme. no te escondas detrás de tu miseria, si conocieras plenamente tu indigencia, morirías de dolor. Solo esto podría herir mi corazón  verte dudar y desconfiar de mi. Quiero que pienses en mí cada hora del día y de la noche, no quiero que hagas mas insignificante acción por otro motivo que el amor, cuando tengas que sufrir, Yo te daré la fuerza, tu me has dado el amor, Yo haré que puedas amar más allá de lo que has podido soñar, pero recuerda, ámame tal como eres, no esperes ser un santo para entregarte al amor, si no, jamás me amarás.
¡Qué hermosura y que alegría y qué gozo! ... Estoy recordando todo lo que ha dicho el Papa Francisco a los jóvenes: "Meteros en el lío del amor, en el lío de la alegría, que no seamos nunca tristes, que nos estemos de una angustia brutal, al contrario, pensemos y tengamos la conciencia del amor de Dios ¿cómo puedo yo angustiarme con mis miserias si son palos secos que El puede quemarlos para hacer un incendio y desde él darme al amor sublime, por tanto, mis queridos hermanos: vivamos la alegría pensando que si alguna debilidad tuviera Dios es precisamente la Misericordia y el Amor.

Por el Presbíero: Don Francisco Aroca Gómez.
Parroquia de la Purísima _ San Felix de Cantalicio.
Zarandona - Murcia